Conjuros pictóricos en Latinoamérica
La República
Lima, Perú. Octubre, 2014
Ritmos Mitológicos. La muestra itinerante Oswaldo Vigas, Antológica 1943-2013 se inaugura hoy en Lima. En ella se exhibe la estética de un pionero del arte latinoamericano que fue en busca de los ecos arcanos del continente.
Oswaldo Vigas, uno de los pintores venezolanos más reconocidos del arte contemporáneo, iba a llegar al Perú y a casi toda Latinoamérica de la mano de una gran exposición retrospectiva. Sin embargo, la muerte asaltó al maestro en abril de este año y no pudo concretar este ambicioso proyecto.
No obstante –y como siempre ocurre con los grandes artistas– su obra le ha sobrevivido y la muestra Oswaldo Vigas, Antológica 1943-2013 se inaugura hoy en el Museo de Arte Contemporáneo con la viuda y el hijo del creador carabobeño. También estarán presentes la curadora Bélgica Rodríguez y el crítico de arte francés Jean-Clarence Lamber.
Esta exhibición especial reúne sesenta pinturas y seis esculturas que representan el proyecto estético de Vigas, quien está considerado uno de los pioneros del arte latinoamericano, junto a pintores como Fernando de Szyszlo, Roberto Matta, Wifredo Lam o Rufino Tamayo.
Si dicho proyecto estético se diseñó para recorrer el continente americano, no solo responde a la calidad del maestro venezolano, sino a que sus creaciones están fuertemente trazadas por el ideal de constituirse en una síntesis original de las raíces culturales de América Latina y de las corrientes artísticas de la contemporaneidad.
La escultura, el grabado, la cerámica, el dibujo y la tapicería también fueron disciplinas en las que este autor volcó sus indagaciones. El crítico de arte francés Gilbert Lascault ha manifestado que, en estas expresiones, Vigas “permite percibir las correspondencias de los elementos de la Naturaleza, expresar las armonías y los ritmos del cosmos”.
En los años 50, una de sus primeras retrospectivas causó polémica por su serie “Las Brujas”, ya que hacía patente su fascinación por las fuerzas ocultas y oscuras de América, relacionadas con la magia, los símbolos telúricos y los exorcismos.
Sin embargo, eso no impediría que la obra de Oswaldo Vigas sea reconocida con diversos galardones como el Premio Nacional de Artes Plásticas de Venezuela, el Premio de la Gulf Caribbean Art Exhibition del Museo de Houston y el Gran Premio de Arte Contemporáneo Prince Rainier III de Mónaco, entre otros.
El creador concretó en vida más de cien exposiciones individuales y numerosas exhibiciones colectivas, bienales y salones de arte. Actualmente la Fundación Oswaldo Vigas trabaja en la edición de una publicación antológica que recoge gran parte de su prolífica producción.
La amistad con Szyszlo
En las tertulias de principios de los años 60 en el famoso Barrio Latino de París, Vigas tuvo la oportunidad de estrechar lazos con Wifredo Lam, Roberto Matta, Antonio Berni y Fernando de Szyszlo, entre otros.
La empatía personal y la cercanía del sentido que le daban a la condición de artista latinoamericano hicieron que el venezolano desarrollara una gran amistad con Szyszlo. A ambos los unía una estética moderna profundamente arraigada a su contexto local y a sus raíces prehispánicas.
Esta cercana relación se evidenció en las muestras conjuntas que ambos presentaron y en las visitas mutuas que hicieron a sus respectivos talleres durante los 70, a partir de cuya retroalimentación surgieron importantes trabajos.
Habrá una conferencia con Elida Román, Bélgica Rodríguez, Jean-Clarence Lambert y Jean Francois Py.
